Por fin estrenamos el calendario 2011. Y la ruta elegida fue la travesía por los cercanos Serantes y Punta Lucero.
El día amaneció frío, con los montes de alrededor recién nevados. Nosotros también llegamos a pisar un poco de nieve. Pero, por suerte, el sol se fue abriendo camino, poco a poco, entre las nubes.
La visibilidad también fue buena por lo que pudimos disfrutar de las impresionantes vistas de montes y costa.
Y, para no tener ninguna queja, el sol nos calentó el rato de la comida. ¡Qué más se puede pedir!. Lo que si nos resultó inusual fue el viaje tan corto de regreso a Castro.
