GRUPO DE MONTAÑA CASTRO

IX DÍA DEL MONTAÑISMO CÁNTABRO

10 de junio de 2012

Llegó la gran cita de los montañeros de Cantabria en el IX DÍA DEL MONTAÑISMO CÁNTABRO.  En esta ocasión, fue nuestro Grupo el encargado de organizar esta ruta de la Federación Cántabra de Deportes de Montaña y Escalada.

Tratándose de Castro Urdiales, el monte elegido no podía ser otro que el emblemático Cerredo, símbolo del Grupo de Montaña Castro. Se diseñaron tres rutas de acceso al pico: una desde el mismo Castro, accediendo por el encinar del monte San Pelayo, pasando bajo la ermita. Una segunda, la de mayor dificultad, ascendía desde Cerdigo. Y la tercera, por fin, desde Islares.

A la cita acudieron, además de los miembros de la Federación, veintiún grupos de montaña,  y, como no,  los anfitriones y un nutrido grupo de simpatizantes. En torno a los 550 montañeros se reunieron en las faldas del Monte Cerredo. Entre los castreños, unos participantes de honor: el señor alcalde, Don Iván González, y el concejal Don Javier Muñoz, que eligieron la subida de Islares tan conocida para el alcalde.


Los participantes nos reunimos en las faldas de Cerredo para realizar los actos previstos. A pesar del aguacero que empezaba a caer, el presidente de la Federación, Don Javier Tezanos, dirigió un saludo de bienvenida a los montañeros. Tras él, el invitado de honor, Don José Manuel Martínez Fernández, el que fue durante doce años presidente de la Federación Cántabra de Montaña, leyó un manifiesto; terminado el cual, fue agasajado por los miembros de la Federación con sendos obsequios.

 Ante la inclemencia del tiempo, se inició el descenso hacia Castro Urdiales, reuniéndose, en esta ocasión, en torno a la plaza del Ayuntamiento. Allí continuaron más actos. Los presidentes de los distintos Grupos recibieron, también, regalos: un libro sobre Castro Urdiales y una figura representativa del patrimonio artístico castreño, de manos de los concejales Doña Guadalupe Liendo y Don Javier Muñoz. Al terminar, el invitado de honor, Don José Manuel Martínez, leyó, de nuevo, el manifiesto montañero. Posteriormente, tuvo lugar la reunión de presidentes de los distintos Grupos con los miembros de la Federación.


Y, para endulzar este día de hermanamiento de los montañeros cántabros, se repartió quesada a todos los participantes y con el baile popular se puso el divertido broche final.


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