GR 71: SAJA - TUDANCA
20 de mayo de 2018

    Cueto de La Cahorra (1.189 m)

    Visita a la Casona de Tudanca

ANDARINES POR 
CANTABRIA 2018

Salida:8:00 h, Pachi Torre. 8:20 h, Colindres. 
8:50 h, Hoznayo. 
9:00 h, Rotonda de Ganzo. 
9:15 h, Cabrojo.

Dificultad: MEDIA BAJA 

pista, cambera, sendero, prado. 

Track
Descripción: Esta ruta corresponde a la tercera etapa del GR 71, "Sendero de la Reserva del Saja" y, precisamente, haciendo gala a su nombre, atravesaremos el maravilloso hayedo del Monte Saja. La ruta comunica el Valle del Saja con el del Nansa, a través del Collado Carraceo, 

Para evitar el tramo del GR, que recorre la carretera (2 km), iniciaremos la ruta en el comienzo de la pista (468 m)  que atraviesa el gran hayedo, en la carretera que sube de Saja a Palombera. Allí veremos un cartel informativo. Nos introduciremos en el bosque en el que veremos hayas de hasta 40 metros y, ya en la zona alta, acebos, espinos albares y saucos. Dado que es una reserva de caza, con mucha suerte, podríamos ver algún ciervo o corzo.


A través de numerosas revueltas, vamos ganando altura. Al finalizar el bosque, llegamos a las Brañas de Bucierca, donde hay una estabulación. La dejamos y continuamos, pasando junto a un depósito de nueva construcción. También hay un abrevadero, pero no tiene caño.

Tomamos el camino carretero disfrutando, si el tiempo lo permite, de las amplias panorámicas de los montes de la Gran Reserva del Saja. Llegaremos al Collado de Brañalengua (1.102 m), desde donde ya podremos ver Peña Sagra y los Picos de Europa. 

A un costado, hay un abrevadero, donde podremos coger agua. Esta zona, desde que dejamos la amplia cambera hasta que llegamos a la pista, que baja hacia Tudanca, es muy poco clara y puede dar lugar a pérdida, muy especialmente con niebla. Si se va solo y no se conoce, es imprescindible llevar un buen track.

Rodeamos el Alto de La Jazona y llegamos a la Braña de Carracedo o Carraceu, donde hay un cercado de ganado.

Desde Carraceu, los que lo deseemos, iniciaremos el ascenso al Cueto de La Cahorra (1.189 m). nos dirigiremos hacia unos escajos, buscando el paso hacia los prados de arriba y, tras una pequeña subida, llegamos al punto alto. Las vistas son impresionantes hacia Peña Sagra y Picos de Europa. Desde La Cahorra, se alarga la Sierra de Linares, que marca la divisoria de las vertientes del Saja y el 
Nansa, destacando el Cueto de La Concilla (1.922 m). Por una cambera descenderemos hacia la pista.

Ya nos encontramos en la vertiente del Nansa. Llegamos al Prado Concejo de Tudanca o Prau Conceju, terreno de aprovechamiento comunal, que se sortea en lotes entre los vecinos el día de San Agustín. Atravesamos el prado, dejando varios ramales a ambos lados.Descenderemos hasta el Mirador de La Jorcada, desde nos asomaremos al Río Nansa y veremos Tudanca y, sobre ella, La Lastra y Santotís.

Tras cruzar una portilla, se continua hacia Tudanca. Por la derecha, ataja el antiguo camino enlosado por el que las vacas tudancas bajaban las basnas, especie de trineos, cargadas de hierba. Finalmente, llegaremos a Tudanca, la Trebanca, que inmortalizó José María de Pereda en su libro "Peñas Arribas".
   

        

LA VIORNA (1.151 m)
6 de mayo de 2018

                
                        
Distancia: 12 km.
Dureza: 
Dificultad: Fácil (terreno)
Duración: 5 horas

Salida: 7:00 h, Pachi Torre
             7:20 h, Colindres
             7:50 h, Hoznayo

Partimos de Potes (295mt), acercándonos a los jardines donde está el monumento al médico rural, tomando el camino asfaltado que los bordea por la izquierda. Dicho camino nos aproxima a las orillas del río Quiviesa, formado por la confluencia de varios arroyos originados en la raya de la Cordillera Cantábrica, y vamos remontando su valle por la orilla izquierda, primero por camino asfaltado y 20 minutos después ya se continúa por una senda de ribera siempre próxima al río.

Por la otra orilla discurre la carretera que sube para el Puerto de San Glorio, mientras que nuestra senda entra en prados de siega con servidumbre de paso que nos permiten llegar al pequeño pueblo de Valmeo (343mt) por caminos alternativos a su carretera de acceso en algo mas de media hora. Este pueblo se asienta en la confluencia de los ríos Quiviesa y su afluente el Retumba, cuyo valle vamos a remontar para conocer las cascadas que va formando el arroyo que lo recorre en su discurrir hasta confluir en el Quiviesa. Para ello se continúa por una senda que remonta este valle de laderas densamente forestadas, con predominio de la encina, yendo siempre próximos al cauce del arroyo, que la senda vadea en varias ocasiones, todo en un ambiente de naturaleza salvaje donde en ningún momento se aprecia que haya sido modificada para buscar algún aprovechamiento ganadero o forestal, con el aliciente añadido de las cascadas que forma el arroyo, que son muchas y de todo tipo, siendo la mas espectacular la última de ellas, que para verla bien hay que salirse de la senda unos pocos metros.

A medida que ganamos altura los claros van ganando terreno y empezamos a pasar por prados cerrados, para enlazar poco después con una buena carretera, que caminando por ella unos doscientos metros nos lleva al pueblo de Maredes (855 mt), en la base para subir al pico de La Viorna, que es la cumbre que pretendemos subir. Un cartel situado a la entrada del pueblo nos informa que hay dos maneras de alcanzar dicho pico: nosotros subiremos por una pista de dos kilómetros que nos llevará al alto de San Martín (1155 mt). Desde donde tendremos una vista espectacular de los cuatro puntos cardinales y ahí van algunos nombres de montañas y lugares que reconocemos: Macizo Oriental, Peña Vieja, Coriscao, Peña Labra, Peña Sagra, Peña Prieta, Curavacas, Bistruey, Lezna, Peña Ventosa etc. Aquí comienza el descenso, primero por una pista que nos acerca a el Pico la Viorna, fácilmente reconocible por la enorme cruz de hormigón de 12 mt de altura que fue inaugurada en 1948. Desde aquí podemos contemplar Potes y multitud de pueblos de Liébana y comarcas adyacentes.


Para ver el Monasterio de Santo Toribio de Liébana hay que avanzar unos metros al norte y situarse sobre una peña. El descenso lo hacemos bajando por una senda que recorre la cimera de la arista entre aclarado encinar, que toma dirección este-noreste y que declina justo en Potes, que es adonde queremos llegar; a los 870 metros de altitud la senda se transforma en un camino-pista y sobre los 735 metros abandona la cimera, siguiendo nosotros por la pista que nos llevará a Mieses, pueblecito situado en la carretera de subida a Santo Toribio.